Todos los días las palomitas se asoman a las casas se retiran con el sonido del tren
y las plantas de plátano miran guardando un silencio absoluto mientras el sonido del tren lastiman sus oídos.
El horizonte repleta de neblina aunque a veces sale el sol temprano y la persona del pan viene siempre
después de que el sonido del tren y motos se escuchase últimamente la salida ya es un estacionamiento siempre que uno sale ni que decir y la bulla de carros…